martes, 25 de mayo de 2010

REPÚBLICA INDEPENDIENTE DEL REGISTRO

El tema de los registros da para escribir un libro, o mejor dicho, un tomo de enciclopedia entera. Tras mi larga y dilatada experiencia con el servicio de registro, lo de estos dos días roza lo superfluo. Ayer haciéndome "un favor personal" y diciéndome que hay más registros. Pregunte a sus compañeros que me engañan.

Pero lo de hoy, es dantesco: 13.59h. Entro con muchas hojas.: ¿Llegó a tiempo? (mira el reloj) "Puf, para todo eso, no", "No, sólo son dos registros". "Tú y yo vamos a acabar mal, no te dije que había más registros". Ya, pero ya te dije ayer que los de Formación me aprietan para tenerlo todo hoy". "Gracias. Hasta Luego".

Menos mal que pasé de darle los otros tres escritos, que me ha tocado ir esta tarde a otro registro, un poco menos borde. Y no hablemos del compañero del ecyl que entro un dia a las 13.55h. y lo primero que hace es resoplar mientras mira el reloj. ¿Sabeis que por esta gentuza productiva, nos bajan el sueldo a los que estamos más horas de lo debido?¿Que esta gente hace una función y se quejan mientras que los demás, no damos abasto?

La República independiente del registro, como tienen puesto en el Servicio de Diputación Provincial

domingo, 23 de mayo de 2010

VALLADOLID CAPITAL Y RURAL


El otro día estuve reunido con dos cracks de la cocina española y me comentaban sobre la sociedad capitalina de Valladolid que en algunos enclaves era muy cerrada. Estas cosas me duelen y no porque no tengan razón, que desgraciadamente lo tengan, sino porque al final esta gente es la que comanda y organiza acciones en la ciudad, muchas veces mirando sólo a la ciudad. Por lo pronto me presento, aunque soy de Valladolid y orgulloso de serlo, el mundo rural de la provincia me ha dado todo lo que soy y lo que tengo. Me encanta el mundo rural vallisoletano, descubrir nuevos rincones, nuevas gentes y desarrollarlo en la medida que pueda.

Quizá por eso soy un enamorado de Asturias porque la diferencia entre el mundo rural y urbano está más cercano. Aquí el poder urbano es mucho más evidente, olvidando en muchos de los casos a la otra parte de la sociedad, la urbana. Que no es peor como nos quieren hacer ver, sino diferente, y en algunos casos mucho mejor.

Intento pensar algo, algún proyecto para trabajar en la "unión". Otra cosa es mentalizar a la gente, que es más jorobado. De momento tenemos aparcado el medio de comunicación que teníamos pensado, pero no me gustaría quedarme ahí. La ciudad tiene mucho que aprender del mundo rural, en calidad de vida, en ideas, en relajación en diversas formas de vista. La ciudad te da oportuniades y nuevas ideas pero no te aporta la humildad, sencillez y calidad que se tiene.

Tenemos todavía gran trabajo en promocionar el mundo rural y lo que es más dificil, romper mentalidades en los urbanitas vallisoletanos, que en muchos de los casos descienden de pueblo o de ciudades cercanas.