POR FINNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNN

La Diputación de Valladolid presenta cuatro novedades editoriales en las colecciones de Poesía, Tierras de Valladolid y Historia: Las Campanas de San Millán, Moraleja de las Panaderas, Encinas de Esgueva y La educación primaria y secundaria
El acto será retransmitido en directo a través de la web institucional www.diputaciondevalladolid.es


Diputación Directo

El presidente de la Diputación de Valladolid, Ramiro Ruiz Medrano –acompañado por diputados provinciales, representantes de otras instituciones, de la vida cultural, social y de los medios de comunicación, además de los autores de los libros, familiares y amigos-, preside el viernes, 23 de enero de 2009, a las 12,00 horas, en el Salón de Plenos del Palacio de Pimentel (C/ Angustias, 44), el acto de presentación de las últimas novedades editoriales publicadas por la Diputación de Valladolid dentro de las colecciones de Poesía, Historia y Tierras de Valladolid:

‘Las campanas de San Millán’, de Antonio Castrillo Villamañán.

‘Moraleja de las Panaderas. Refugio entre pinares’, de Miguel Angel García Velasco,

‘Encinas de Esgueva. El pueblo, la gente, su tierra’, de José Félix Rivera Ontañón y Antonio Rivera Ontañón.

‘La educación Primaria y Secundaria en la provincia de Valladolid (1857-1875)’, de Ignacio Martín Jiménez.

http://www.diputaciondevalladolid.es/prensa/previsiones_d.shtml?idboletin=452&idseccion=4941&idarticulo=49817&fecha=20090123

72 HORAS

Va quedando menos para mi momento soñado. He salido en televisión, radio, prensa... y te gusta, gusta que valoren lo que haces, pero no era algo que me llenaba. Era fútbol, ese deporte en algunas ocasiones borreguil, pero del que intentamos que la inteligencia y el debate impere por encima de todo.

Lo de ahora es diferente, es fruto de un trabajo de varios años y sobre todo, de ciertas dosis personales que has metido en ello. Cuando me dijeron que me publicaban el libro, fue "la hostia", pero a medida que se acerca el día no puedo describir lo que estoy sintiendo, bueno sí, dos cosas: emoción y responsabilidad. Emoción porque es mucho tiempo, porque es un sueño conseguido y porque he hecho algo que llevaba mucho tiempo detrás de ello, un homenaje de la mejor forma posible a todos los que han vivido y por supuesto, a mi familia, aunque no estemos en el mejor momento posible.
Y responsabilidad porque debo quedar bien ante Diputación, ante los demás escritores, ante nuestros invitados y dejar el nombre de mi pueblo bien alto. Luego llegará la crítica y aprenderé porque espero escribir más cosas.

Ya queda poco, quienes van a ir avisados, el traje comprado, puesto y probado... solo falta el discurso, la llave del libro, que en ello estoy. Y no es fácil, te acuerdas de muchas cosas que no puedes poner: me acuerdo de cuando fui en bici desde Medina hasta Moraleja porque no tenía coche, de la jaqueca mensual antes de presentar la tesina, del tribunal de la tesina, del cementerio, de mis seres añorados, de mi abuela, de mi tioabuelo y como pude llegar a 130 por esa carretera sin arreglar en el día de su adios.... Me vienen muchas cosas a la cabeza y debo plasmarlo de la mejor forma posible, usando buena pluma en 7 minutos. Espero lograrlo, es la meta, lo deseado, y allí llegaré.

LA GENEALOGIA, UN DEBER CON NUESTRA HISTORIA

La genealogía es una ciencia muy bonita y apasionante. Se trata de descubrir nuestros antepasados. ¿Cómo se hace? Muy fácil, con paciencia, contactos, buen ojo y muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuchas horas. Después está la suerte de cada persona o la historia que haya tenido cada familia: si ha tenido madres solteras, condes, gente que hizo las américas, militares, etc.
Por la parte que me toca, empecé en este mundo a los 23 años y poco a poco he ido descubriendo cosas. No acabas ni de coña pero es algo que te engancha bastante. Por lo pronto hay dos parcelas bien diferenciados, mi línea materna, que rodea la zona de Medina del Campo, entera, y de cuyas ramas en algún caso he llegado hasta 1630.

Por mi parte paterna, es más difícil y apasionante a la vez. Lo que era de Valladolid todo ello en un principio se fue torciendo hasta llegar a tocar Palencia, Burgos y Córdoba. Resulta que mi apellido Jurado es andaluz (sin comentarios). Muy potito y tal pero luego toca irse al pueblo e investigar los ascendentes (¡a que ya no mola!)Por lo pronto sigo con mi línea vallisoletana, que encima he conocido por internet a gente tan apasionada como yo o incluso más por esta ciencia y nos intercambiamos información. Gracias a Federico, Eduardo y Pablo con quienes mantengo contacto y son gente muy maja y bondadosa.

Seguimos completando casillas hasta poder realizar un gran poster de mi vida y antepasados, lo que uniré a mi escuco heráldico que realizaré algún dia de estos.